Tras el accidente nuclear de Fukushima se ha reabierto el debate sobre las energías nucleares. En distintas partes del mundo se han producido sucesivas protestas contra la energía nuclear y pidiendo otras formas de energía sostenible. Hacía tiempo que esto no sucedía, y para ser más concreto, desde que el monotema del cambio climático se cambió por la crisis económica mundial. Pero ahora que las mayores potencias mundiales empiezan a salir de la recesión es hora de cambiar de tema, y nada mejor que hablar de viejos conocidos.
Las armas del futuro apuntan a occidente